EL ÚLTIMO HASTA LUEGO
Mi pastora alemana qué noble era
Y mi pastora belga muy nerviosa...
Mi pastora alemana poderosa
Y mi pastora belga zalamera.
Y se apagó su luz de igual manera
De una forma quizás tan silenciosa;
La vida en su comienzo generosa,
La muerte en su final tan pasajera.
Mi Mofy de colores negro y fuego,
Mi Bora con su pelo entreverado;
Pasean las dos juntas con su juego
Tan bien pegadas justo a mi costado.
En este adiós eterno, un hasta luego
Con los labios inermes pronunciado.
José Luis Guillén Lanzas, 2 Julio 2016.
www.safecreative.org/work/1607028286509
