Mariló me utiliza y me maltrata
con su mirada oscura y sibilina
mientras baila conmigo femenina
despacio y lentamente la bachata.
La morena de pronto se desata
y con esa pupila cristalina
la de los ojos negros me domina
que sigo siendo el capitán pirata.
Con ciento treinta kilos de pesado
y con mi metro ochenta de estatura
de tanto movimiento estoy cansado.
Así que la cogí de la cintura
y se fue con su labio perfilado
sin que yo le quitara la pintura.
José Luis Guillén Lanzas, 2023-11-27
www.joseluisguillenlanzas.com
https://www.safecreative.org/work/2311276233084-1083-marilo-y-el-capitan-pirata_231127_185556-docx