401. LA SORPRESA

401. LA SORPRESA

Ha ocurrido una sorpresa:
amanece y mi gurrina
no me toca (que se empina)
las pelotas y está tiesa.
Este poeta os confiesa
al ver su cipo empalmado,
incólume y colorado,
con la cabeza pelada...
Y al despertar su almohada
le dice que lo ha soñado.

José Luis Guillén Lanzas, 7 Diciembre 2019